Cientos de personas se manifestaron en Monterrey contra la inseguridad de Nuevo León, pero la marcha concluyó entre agresiones verbales y varios intentos de reventar la manifestación provocados por supuestos grupos priístas cercanos al Ejecutivo estatal / Los manifestantes pidieron la renuncia de los tres órdenes de gobierno: el alcalde panista, el gobernador priísta y la del ilegitimo de Los Pinos, Felipe Calderón MONTERREY, Nuevo León, 4 de septiembre (UNIVERSAL, NOTIMEX, AFP) - Unas mil personas se manifestaron este domingo en la ciudad mexicana de Monterrey (norte) para protestar contra la inseguridad, luego del incendio intencionado del casino Royale que dejó 52 muertos, constató un periodista de la AFP.Jorge González dice que está molesto, no puede ocultar su sentimiento. Junto con su familia fue a apoyar la protesta contra los administraciones del gobernador Rodrigo Medina y del alcalde Fernando Larrazabal. “Venimos a manifestarnos en contra del gobierno de cualquier nivel. Aquí están infiltrados. Venimos la gente libre, y el gobernador, como no puede con el paquete, tiene que valerse de infiltrados para contrarrestar las manifestaciones del ciudadano”, asegura González en la Macroplaza de esta capital. El ciudadano afirma lo anterior porque la marcha ciudadana para exigir la renuncia del gobernador Rodrigo Medina (PRI) y del alcalde de esta ciudad Fernando Larrazabal (PAN) concluyó entre agresiones verbales y varios intentos de reventar la manifestación provocados por supuestos grupos priístas cercanos al Ejecutivo estatal. En la Explanada de los Héroes, cientos de personas se congregaron para exigir la dimisión de ambos funcionarios por los niveles de inseguridad en los que se encuentra el estado y los casos de corrupción de la administración local que se han ventilado tras el atentado en el Casino Royale. La manifestación fue convocada por organizaciones civiles bajó el lema “Monterrey dice hasta aquí!”. Los regiomontanos portan pancartas con las que protestan y exigen: “Larrazabal renuncia ya”, y también, “Recuperemos México, no más miedo, no más muerte. Renuncia Felipe Calderón”. Por micrófono, los organizadores recuerdan el carácter pacífico de esta manifestación, por eso a los jóvenes que usan máscaras les piden que se las retiren para que todos se vean cara a cara. Sin embargo, poco antes de las 18:00 horas, grupos con pancartas en contra del presidente Felipe Calderón que exigían su renuncia, con tambores y con máscaras negras de luchadores, tomaron literalmente la plaza y trataron de subir al estrado. Dos expresiones demostraron el nivel de encono que se registró este domingo: “Vendequesos” y “Comelonches”. La primera exclamación vino de los priístas hacia los ciudadanos, quienes supuestamente apoyaban al edil panista. La segunda, de los “ciudadanos” que exigían a los grupos priístas respeto a la manifestación contra los llamados “gobiernos corruptos” de Nuevo León. Los priístas fueron encabezados por quien dijo llamarse “Emilio Gómez”, quien encaró a los organizadores y exigió que se respetara la figura del gobernador Rodrigo Medina y no se hablara mal de él. Tras varios intentos, los integrantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) subieron al templete para colocar mantas con las frases: “Alto al genocidio. Renuncia, Calderón”. Tristeza Daniel Rodríguez, estudiante y uno de los organizadores de la protesta, aseguró que era una tristeza que grupos de infiltrados pagados por el PRI no respetaran el carácter pacífico de la manifestación y agredieran a los demás asistentes. “¡Hey!, ¿a qué venimos, señores? Nosotros somos los jefes de este gobierno, no los gobernados. Somos el cambio y no el estancamiento. Queremos correr a todos esos gobernantes ineptos, a esos políticos que viven enamorados del poder y que gozan de beneficios ilegales. ¡Hasta aquí la corrupción e impunidad! ¡Hoy decimos: hasta aquí!”, arengó el estudiante. “Los que quieran participar, aquí estamos, como una fuerza ciudadana, no política, ni partidistas, ni con interés económico, así que si vienen a eso, ¡lárguense!”, exigió. La protesta en la capital neoleonesa concluyó con la entonación del Himno Nacional y cuando los priístas se trasladaron a las escalinatas del Palacio de Gobierno, mientras con sus altavoces exigían la renuncia del presidente Calderón. Los manifestantes se reunieron frente al palacio de gobierno en Monterrey, capital del estado de Nuevo León, para exigir la renuncia del gobernador Rodrigo Medina y del alcalde, Fernando Larrazabal.El incendio ocurrido el 25 de agosto pasado “es la gota que derramó el vaso y la ciudadanía ya está harta”, dijo en un discurso improvisado Gitzel Gutiérrez, estudiante universitaria.Bajo una temperatura de más de 40 grados centígrados los inconformes, que tomaron por segundo domingo consecutivo la plaza, protagonizaron altercados con otro grupo identificado con el gobernador, del opositor Partido Revolucionario Institucional, que trató de romper el orden de la protesta clamando por la reuncia del presidente de la República, Felipe Calderón. 
lunes, 5 de septiembre de 2011
AL ROJO VIVO EN MONTERREY PIDEN LA RENUNCIA DE LOS TRES ORDENES DE GOBIERNO
Cientos de personas se manifestaron en Monterrey contra la inseguridad de Nuevo León, pero la marcha concluyó entre agresiones verbales y varios intentos de reventar la manifestación provocados por supuestos grupos priístas cercanos al Ejecutivo estatal / Los manifestantes pidieron la renuncia de los tres órdenes de gobierno: el alcalde panista, el gobernador priísta y la del ilegitimo de Los Pinos, Felipe Calderón MONTERREY, Nuevo León, 4 de septiembre (UNIVERSAL, NOTIMEX, AFP) - Unas mil personas se manifestaron este domingo en la ciudad mexicana de Monterrey (norte) para protestar contra la inseguridad, luego del incendio intencionado del casino Royale que dejó 52 muertos, constató un periodista de la AFP.Jorge González dice que está molesto, no puede ocultar su sentimiento. Junto con su familia fue a apoyar la protesta contra los administraciones del gobernador Rodrigo Medina y del alcalde Fernando Larrazabal. “Venimos a manifestarnos en contra del gobierno de cualquier nivel. Aquí están infiltrados. Venimos la gente libre, y el gobernador, como no puede con el paquete, tiene que valerse de infiltrados para contrarrestar las manifestaciones del ciudadano”, asegura González en la Macroplaza de esta capital. El ciudadano afirma lo anterior porque la marcha ciudadana para exigir la renuncia del gobernador Rodrigo Medina (PRI) y del alcalde de esta ciudad Fernando Larrazabal (PAN) concluyó entre agresiones verbales y varios intentos de reventar la manifestación provocados por supuestos grupos priístas cercanos al Ejecutivo estatal. En la Explanada de los Héroes, cientos de personas se congregaron para exigir la dimisión de ambos funcionarios por los niveles de inseguridad en los que se encuentra el estado y los casos de corrupción de la administración local que se han ventilado tras el atentado en el Casino Royale. La manifestación fue convocada por organizaciones civiles bajó el lema “Monterrey dice hasta aquí!”. Los regiomontanos portan pancartas con las que protestan y exigen: “Larrazabal renuncia ya”, y también, “Recuperemos México, no más miedo, no más muerte. Renuncia Felipe Calderón”. Por micrófono, los organizadores recuerdan el carácter pacífico de esta manifestación, por eso a los jóvenes que usan máscaras les piden que se las retiren para que todos se vean cara a cara. Sin embargo, poco antes de las 18:00 horas, grupos con pancartas en contra del presidente Felipe Calderón que exigían su renuncia, con tambores y con máscaras negras de luchadores, tomaron literalmente la plaza y trataron de subir al estrado. Dos expresiones demostraron el nivel de encono que se registró este domingo: “Vendequesos” y “Comelonches”. La primera exclamación vino de los priístas hacia los ciudadanos, quienes supuestamente apoyaban al edil panista. La segunda, de los “ciudadanos” que exigían a los grupos priístas respeto a la manifestación contra los llamados “gobiernos corruptos” de Nuevo León. Los priístas fueron encabezados por quien dijo llamarse “Emilio Gómez”, quien encaró a los organizadores y exigió que se respetara la figura del gobernador Rodrigo Medina y no se hablara mal de él. Tras varios intentos, los integrantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) subieron al templete para colocar mantas con las frases: “Alto al genocidio. Renuncia, Calderón”. Tristeza Daniel Rodríguez, estudiante y uno de los organizadores de la protesta, aseguró que era una tristeza que grupos de infiltrados pagados por el PRI no respetaran el carácter pacífico de la manifestación y agredieran a los demás asistentes. “¡Hey!, ¿a qué venimos, señores? Nosotros somos los jefes de este gobierno, no los gobernados. Somos el cambio y no el estancamiento. Queremos correr a todos esos gobernantes ineptos, a esos políticos que viven enamorados del poder y que gozan de beneficios ilegales. ¡Hasta aquí la corrupción e impunidad! ¡Hoy decimos: hasta aquí!”, arengó el estudiante. “Los que quieran participar, aquí estamos, como una fuerza ciudadana, no política, ni partidistas, ni con interés económico, así que si vienen a eso, ¡lárguense!”, exigió. La protesta en la capital neoleonesa concluyó con la entonación del Himno Nacional y cuando los priístas se trasladaron a las escalinatas del Palacio de Gobierno, mientras con sus altavoces exigían la renuncia del presidente Calderón. Los manifestantes se reunieron frente al palacio de gobierno en Monterrey, capital del estado de Nuevo León, para exigir la renuncia del gobernador Rodrigo Medina y del alcalde, Fernando Larrazabal.El incendio ocurrido el 25 de agosto pasado “es la gota que derramó el vaso y la ciudadanía ya está harta”, dijo en un discurso improvisado Gitzel Gutiérrez, estudiante universitaria.Bajo una temperatura de más de 40 grados centígrados los inconformes, que tomaron por segundo domingo consecutivo la plaza, protagonizaron altercados con otro grupo identificado con el gobernador, del opositor Partido Revolucionario Institucional, que trató de romper el orden de la protesta clamando por la reuncia del presidente de la República, Felipe Calderón.