jueves, 8 de septiembre de 2011

EL PRIMER MANDATARIO FEDERAL FELIPE CALDERON HINOJOSA VISITO CHETUMAL PARA LA COBERTURA UNIVERSAL DE SALUD" DISCURSO"

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Por José Landeta Villanueva




Gracias.
Muy buenas tardes, amigas y amigos.
Saludo al licenciado Roberto Borge Angulo, Gobernador del Estado de Quintana Roo. Le agradezco, Gobernador, sus palabras y su hospitalidad.
También saludo a nuestro invitado, ahora en estas tierras. En un momento más estaremos en el querido Estado de Campeche, también para declarar la Cobertura Universal de Salud.
Al licenciado Fernando Ortega Bernés, Gobernador de Campeche.
Al Diputado Eduardo Espinosa, Presidente de la Comisión del Congreso.
Y al Magistrado Gabriel Villanueva, Presidente del Tribunal Superior de Justicia.
Al licenciado Carlos Mario Villanueva, Presidente Municipal de Othón P. Blanco.
Al General Anastacio García Rodríguez., Comandante de la XXXIV Zona Militar.
Y al Vicealmirante Carlos Enrique Bernal, Comandante de la XI Zona Naval.
A ambos les pido que transmitan a la tropa, a la marinería, a nombre propio y del pueblo de México y de Quintana Roo, nuestra gratitud por el esfuerzo que las Fuerzas Armadas desempeñan en la protección de todos los mexicanos y de la seguridad interior y soberanía exterior del país.
Y también saludo a quienes son el alma y el espíritu de todo el Sistema de Salud y de los hospitales y clínicas, de hospitales como éste, a todos los médicos, a las enfermeras, especialmente a las enfermeras, a los enfermeros, a las doctoras que están aquí presentes y, además, en muy buen número.
También saludo a las alcaldesas y a los alcaldes de Quintana Roo aquí presentes. Les agradezco mucho su presencia, a los 10.
Como se ha dicho ya. Bueno, saludo a todos los presentes, además, que me da mucho gusto que estén aquí en una hora tan difícil.
Y qué bueno venir a Chetumal.
Nuevamente para anunciar, además, algo verdaderamente importante e histórico: El haber alcanzado la cobertura universal de salud en Quintana Roo.
Qué significa eso, amigas y amigos.
Algo que se dice fácil, pero que no lo es. Significa que, a través del Seguro Social, a través del ISSSTE y, en este caso, a través del Seguro Popular, hoy cada quintanarroense, niño o niña, adulto mayor, joven, señor, señora, señorita, todos tienen un seguro médico eficaz, que les financia, les paga, les asegura, precisamente, el ser atendidos.
O en otras palabras, lo que yo propuse y me comprometí desde antes de ser Presidente de la República. Yo dije que un día llegaría en el que todo mexicano, toda mexicana, sin diferencia de edad, sexo, condición social, tendría garantizado: médico, medicinas, tratamiento y hospital, cuándo y cómo lo necesitara.
Y eso es lo que hemos logrado hoy en Quintana Roo y en toda la Península de Yucatán.
También, sé que ésta es una de las entidades más jóvenes del país. Y como mexicano, y además gran aficionado a las riquezas y a las bellezas turísticas de Quintana Roo, siempre me ha impresionado el enorme desafío de este estado.
Es la entidad de la República Mexicana que más ha crecido o de las que más han crecido en su población. Hace apenas 20 años, Quintana Roo tenía menos de medio millón de habitantes y según el Censo del año pasado, ya tiene más de un millón 300 mil habitantes; es decir, casi triplicó su población.
Como gobernante, sé que eso es muy complicado, porque de por sí cuando la población no crece, uno no se da abasto para darle servicios a la gente, que necesitan drenaje, que necesitan electricidad, agua, seguridad.
Y sé, y escucho bien los planteamientos que me hicieron al entrar muchos moradores de Chetumal, es importante fortalecer esas instituciones de seguridad aquí.
Y aún cuando la población no crece, siempre es difícil satisfacer esas necesidades; ahora creciendo, duplicándose, triplicándose, mucho más difícil es. Y, por eso, Quintana Roo tenía en el rubro de salud un déficit tan, tan importante.
De hecho, en el año 2000, fíjense ustedes, en el año 2000, sólo cuatro de cada 10 quintanarroenses tenían acceso a servicios de salud. Es decir, más de la mitad estaban descubiertos, desprotegidos, descobijados, como también dicen en algunos lugares.
Y si se enfermaba un hijo, con lo que sea a romper el cochinito, y si no había cochinito a vender la casa. Y si no había casa, los animalitos, el coche; a pedir prestado, a caer en las manos de los usureros, lo que fuera. A dar todo lo que se tiene y a endeudarse con lo que no se tiene.
Y esta tragedia, aparte de lo duro que es tener un hijo enfermo, era doble o triple, porque, además, se empobrecía la familia, y como suelen ser las familias más pobres, más pobres todavía lo eran.
Por eso tomamos una de las decisiones más importantes en mi Gobierno. Deben saber, amigas y amigos, que a la hora de gobernar, la tarea más difícil es tomar decisiones.
Por qué razón.
Porque siempre, siempre, las necesidades de la gente son más grandes que los recursos que tenemos los gobiernos. Y siempre hay que escoger qué resuelves. Y bueno, hay muchas necesidades. No sé. Agua, luz, drenaje, seguridad, educación, salud, vivienda, trabajo. En fin. Muchas cosas.
Y todas tienen que resolverse, y créanmelo, en todas estamos trabajando fuerte. Sólo que si uno deja de tener luz, bueno, a ver cómo se alumbra. Como los papás, o como los abuelos, con velas o con lo que sea.
Si uno deja de tener agua, bueno, habrá que ir a acarrear, a conseguir, a comprar. En fin. Pero, amigos, si uno deja de tener salud, si uno deja de tener doctor, si uno deja de tener medicinas, ahí no se pierde una hora de camino, ahí se pierde hasta la vida.
Por eso la salud es lo más importante. Y no sólo eso. Yo lo aprendí de lo que oía en mi casa y de lo que oigo en las comunidades, en la sabiduría popular. Qué es lo que dice la gente: La salud es lo primero. Primero la salud. Y por eso, amigas y amigos, decidimos: el primer problema que vamos a resolver completamente en México va a ser el acceso a los servicios de salud.
Por eso, la cobertura universal de salud: servicios de salud para todos. Y eso es, hoy, precisamente, lo que celebramos en Quintana Roo.
A mí me impresionó mucho el testimonio de Maribel, que escuchamos ahorita, y más que el testimonio, aunque no habló, ver la cara de pingo y de contento de Miguel Ángel, su hijo, que está por ahí, asomándose atrás de un Diputado.
Y me emocionó mucho. Yo también soy padre de familia, y la verdad es que lo que más uno quisiera, por lo que daría todo, es por los niños.
Y sé de la tragedia de Maribel. Ocho hijos. Pesado. Y de repente, que uno te digan que tiene cáncer, más pesado todavía. Qué dolor.
Mucha gente, como Maribel, hasta hace poquitito. Miren, esto de que el Seguro Popular curara el cáncer de los niños no es de antes. Antes no se hacía, apenas hace dos años lo metimos al Seguro Popular.
Y qué pasaba antes.
Una mamá, como Maribel, oía que su hijo tenía cáncer, primero se ponía a llorar, iba con el médico. El médico le decía, lo que le dijo: Eso es muy caro; el tratamiento es muy caro; la operación es muy cara, las medicinas son muy caras y, además, hay el riesgo de que no haya éxito.
Entonces, los papás no tenían alternativa. Iban al tratamiento hasta donde les alcanzaban las cosas que tenían, y luego de eso, abrazaban a sus niños y a esperar un desenlace.
Tan es así, amigas y amigos, que les doy una cifra muy triste.
Hasta hace dos años, siete de cada 10 niños con leucemia, siete de cada 10 se morían. Sin embargo, a partir de que metimos el cáncer en niños, hasta 18 años, como uno de los padecimientos que atiende el Seguro Popular, le estamos dando la vuelta a la tortilla. Y ahora es al revés.
Si antes siete niños de cada 10 con leucemia se morían. Hoy es al revés. Hoy se salvan, por lo menos, siete de cada 10 niños con leucemia, como es el caso, precisamente, del ángel que tenemos aquí, que es Ángel, el hijo de Maribel.
Así que, felicidades, Maribel.
Felicidades, querido Ángel.
Tu mamá, que es de mucha fuerza, de mucho valor, ha luchado mucho por ti y afortunadamente el Seguro Popular, en lo que le toca al Seguro Popular, tú puedes salir adelante.
Te toca estudiar mucho, mi amigo. Tienes que echarle muchas ganas a la escuela para que seas, el día de mañana, un mexicano de bien, no de esos que hacen mal, sino alguien que haga mucho bien, y que también puedas honrar a tu mamá, que es la mejor manera de agradecerle lo que ha hecho ella por ti. Que salgas tú adelante, con tus amigos, y que le eches muchas ganas a la vida, y si se puede, que también le vayas al Morelia, si es que llega la oportunidad, o de perdida aquí, al Atlante, no, o qué. Bueno, bueno.
El que nada pide, nada merece.
A todos ustedes, amigas y amigos, también échenle muchas ganas. Yo sé que han pasado momentos difíciles.
Todas las familias mexicanas, con las crisis que hemos tenido, las crisis económicas que tuvimos, que fue la peor que haya tenido la generación presente en el mundo.
Sé que ha habido también momentos duros.
Y yo recuerdo cuando vine aquí, ya como Presidente, por primera vez, el Huracán Dean, tuve que venirme desde Canadá, para aquél huracán que era categoría cinco. Me acuerdo. Yo decía: Dios mío, qué es eso. Y aquí estuvimos. Se fue la luz. Se inundó. Tiradero de árboles. Pero, afortunadamente, salimos adelante.
Yo les quiero decir, quintanarroenses, que vamos a salir adelante. Que tenemos problemas, sí, pero que enfrentándolos, vamos a superar estos problemas.
Y que así, como hoy, México es de las contadísimas naciones, poquísimas que en el mundo han alcanzado cobertura universal de salud, que hay naciones, cientos, cientos de naciones que no la han alcanzado. Que países tan poderosos, como Estados Unidos, no la han alcanzado, pero que, en cambio, México es del puñado de países en desarrollo que ya alcanzó cobertura universal de salud.
Así como hemos superado, como hemos logrado esta meta, y como estamos superando ese desafío, vamos a superar todos los desafíos de nuestro gran país, que es México. Y para ello, tenemos que echarle ganas, perseverar fuertemente hasta lograr nuestros objetivos. No desfallecer, no desistir; seguir luchando, seguir batallando, como ustedes, sé, que luchan día con día por sacar adelante a su familia.
Es un buen día para Quintana Roo, es un buen momento.
Yo sé que falta mucho por mejorar los servicios de salud. Pero estamos trabajando en ello. Estamos construyendo más hospitales. Aquí, la Torre de Especialidades en Chetumal, que mencionaba el Gobernador; el nuevo Hospital General de Playa del Carmen, que ya está listo para echar el remojo; el otro hospital del Seguro, que también hicimos allá en Playa del Carmen; la Unidad de Especialidades Oncológicas de la Mujer; el nuevo Hospital General de Cancún; el nuevo Hospital, también, de Isla Mujeres. En fin.
Estamos echándole ganas para que haya más espacios de salud para la gente, y también, recursos para que ustedes puedan tener, el Gobierno del estado pueda pagar los médicos y las enfermeras, y las medicinas que se necesitan.
Por cada afiliado al Seguro Popular, el Gobierno Federal paga una cantidad al estado. De tal manera, que hoy, el Estado de Quintana Roo recibirá unos mil 300, mil 400 millones de pesos al año, por el Seguro Popular para, precisamente, poder mejorar poco a poco la calidad del servicio de salud que prestan ustedes.
Así que, vamos a seguir trabajando, amigas y amigos. Vamos a seguir trabajando para ser el Quintana Roo y el México que todos queremos ver, y que con el esfuerzo de todos, también, un día llegará en beneficio de Ángel, de sus compañeritos, de sus hermanos y de millones y millones de mexicanas y mexicanos que vienen detrás de nosotros, y a los que les abriremos un espacio para que puedan vivir con dignidad, con libertad, con justicia y con democracia, en nuestro México querido.
Muchas gracias, Quintana Roo.
Muchas gracias, Chetumal.









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